domingo, 11 de abril de 2010

Domingo

Con qué facilidad nos hemos cansado de compartir nuestras horas. Está bien.

2 comentarios:

  1. Puede que ya no queden tantas cosas que compartir

    ResponderEliminar
  2. No quedó nada, nada, excepto una leve sensación de asco y bilis en la lengua. Pero gracias al cielo ya es agua más que pasada.

    ResponderEliminar